Por: Gustavo M. da Silva
Periodista, historiador, bohemio. Toda una mente brillante. Conocía a todos, pero no era amigo de nadie. Es que no se callaba nada, y desde ya que todos saben que las verdades suelen causar bastante dolor. Pero así era Victor Hugo Ameneiro. Y así, lo queremos recordar.
La noticia nos paralizó el día domingo. El entierro había sido el día anterior, y nos enteramos tarde. Pero para la memoria, nunca será tarde un recuerdo.
Conocí a Ameneiro desde hace unos veinte años. Todo un batallador. Se lo podía comparar con el Quijote y los molinos de viento. Para él ninguna batalla era perdida del todo. Se peleaba a muerte con Rotela, el ex secretario de obras públicas de la municipalidad por el famoso "Pulmón Verde" -hoy Parque Eva Perón de Remedios de Escalada-, aunque después comentaba, "nació en mi barrio, lo conozco desde chiquito".
Tuvo protagonismo en los momentos históricos decisivos del Partido de Lanús, cuando se hizo cargo de la Estafeta de Correos ubicada en Villa Argerich, barrio del que no se separaría nunca, a pesar que luego fuera a vivir enfrente del Hospital Melo, en Escalada. En 2002, con esta productora de cine, quisimos ir más allá de lo que ya habíamos ido, y darle cuerpo al primer documental de Lanús titulado "Ayer y Hoy de Villa Argerich". Un trabajo realizado bajo el rigor periodístico, histórico, y con muchos políticos con ganas de participar, pero que dejamos afuera por el bien del trabajo. Todos los textos que leyó el locutor en off, Eduardo Angel Rochia en ese documental, fueron elaborados por Victor, el cual, vimos, y nos asombró, por la preparación para cada parte de su participación en el trabajo. Si bien otros colegas aportaron valiosos datos, Victor pasó meteoricamente a ser el "alma mater" del documental, que dicho sea de paso, fue el trabajo documental más visto sobre la historia de Lanús en la historia de este partido, y por consiguiente, también el de esta productora. Aún recuerdo, que como la administración anterior no era muy partícipe a que los independientes pudiesen realizar cualquier tipo de trabajo para ser pasado en pantalla grande, hicimos en la Secretaría de Cultura una proyección privada para la Junta de Estudios Históricos del Partido de Lanús, el cual alguno que otro miembro había discutido en diferentes ocasiones porque Víctor Hugo descreía absolutamente del saladero "Las Higueritas", cuya propiedad decían era de Rosas, y lo discrepaba a los cuatro vientos. Sin embargo, luego de la proyección, uno de los que sí creía en el saladero me dijo, "la verdad que acá Ameneiro estuvo bien". En mi opinión personal, las propiedades que tenía Rosas en distintos lugares sí existían, pero mucho político vivo se dió cuenta cuando un presidente repatrió los restos desde Reino Unido, y quiso llevar agua a su molino, y utilizó inteligentemente a algún historiador. De ahí la famosa polémica.
Luego tuvo una grave enfermedad, tuvo que ser internado por un largo tiempo en el Hospital Evita de Lanús, allí lo reconocían como "el señor de la película", es que "Ayer y Hoy de Villa Argerich" se había estrenado allí, tras haber sido prohibida en la Capital por considerarse "una propaganda política". Aunque más tarde si lo pudiéramos pasar en el Congreso de la Nación, donde asistieron por primera vez autoridades municipales.
Todo lo que se puede decir es que hoy Lanús está de duelo, porque falleció una de las mentes más brillantes que ha tenido. Más allá de todo defecto, su aporte en favor de la cultura y de la historia del partido de Lanús es indiscutible. Y asi lo queremos recordar.
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